Zytonic Comparte en FacebookComparte en TwitterComparte via WhatsApp Ezequiel Monjes (Caracas, 1999) usa la fotografía, el videoarte y el performance para explorar en la androginia y el carácter escultórico del cuerpo un planteamiento sobre lo humano. Abre las imágenes para leer más de su propuesta. Zytonic 07 de junio de 2020 Este trabajo lo inspira el ensayo "Posing Soul: Joliesse en silhouettes", un estudio de la pose dentro del marco estético del género. Queríamos ahondar en ese espacio que vive entre lo masculino y lo femenino. Foto: Miguel Amortegui Busco ser exagerado, femenino, bello. Lo hago a través de la estética ballroom, una escena 100% queer, donde el display del performer vale más que los elementos que lo acompañan. El voguing es una práctica dentro del Ballroom. Tengo una relación particular con el cuerpo y se ha ampliado con el tiempo. La exploración corporal ha sido fundamental para entenderme a través de la estética y la emocionalidad. La fotografía captura la emoción del cuerpo, pero el performance la cuenta. Al principio quería ver a mi cuerpo como algo bello, para confrontar mis propias inseguridades: de allí la reimaginación de la altura, la delgadez, el color negro de mi piel. Después se convirtió en una interacción más emocional. Intento desafiar la realidad de mi propio cuerpo, y buscar su carácter escultórico, basándome en líneas y formas. El primer sello de mi trabajo fueron los cuellos largos, trato de plantear otra forma de belleza del cuerpo.